Entre los accesorios imprescindibles de todos los que gustamos disfrutar el vino debemos tener es un buen sacacorchos y no me refiero a su estética, sino a su funcionamiento. Cuando no se tiene el accesorio que cumpla su función con eficiencia, comienza una guerra contra la botella, con el sacacorchos como arma, intentando hasta con gestos de fuerza extrema y movimientos exóticos, lograr algo tan simple como quitar el corcho y disfrutar del vino que acaba de nacer. A fin de evitar estos inconvenientes desagradables, recomiendo fervientemente tener un sacacorchos de dos tiempos o doble impulso. Se trata del modelo que ilustra este comentario, a simple vista da la sensación de ser el diseño clásico y de hecho gran parte de su estructura es igual, la diferencia radica en la parte móvil, es decir la que se apoya en el borde de la botella al momento de impulsar hacia arriba , es decir donde hace apoyo el destapador(sin contar el helicoidal). Mientras que en los modelos clásicos esta pieza móvil es una sola, en el de dos tiempos está formada por dos partes unidas, que son los apoyos(2) a fin de impulsar hacia arriba. Esto reduce la fuerza que uno debe hacer a menos de la mitad. Su precio oscila entre los 15 y 25 pesos, sin caja ni presentación para regalo. A mi juicio es uno de los mejores sistemas, ya que es mínima la fuerza que se necesita para quitar el corcho, no es de gran tamaño y permite apreciar el descorche de la botella.
Existe otro tipo de destapadores muy popularizado que consta de un capuchón metálico y dos especies de alas que al hacer presión hacia abajo va extrayendo el corcho. No es el mejor sistema, es muy aparatoso y no es de lo más estético.
Un sistema que está muy difundido en los últimos años es el del sacacorchos neumático. Un sistema que recomiendo especialmente para mujeres o todo aquel que con el mínimo esfuerzo quiera extraer el corcho. El sistema consiste en un cilindro, normalmente forrado en madera, del que sale una aguja que se inserta en el corcho y al insuflar aire con el cilindro dentro de la botella a través de esta aguja, sale el corcho fácilmente. Este tipo de sacacorchos tienen otro costo que los de demás y se consiguen desde los $140 en adelante.
Hay muchas más variedades, tipos y diseños de sacacorchos, pero en cuanto a eficiencia del sistema creo que estos son los más adecuados.
Un último detalle no debe pasar inadvertido. Es muy habitual , incluso en buenos restaurantes, destapar la botella de vino de forma tal que en su última parte aceleran el proceso para producir el ruido típico de descorche y normalmente miran a los demás buscando aprobación . No está bien, no es elegante y además no tiene sentido. Como todo nacimiento debe darse con suavidad, delicadeza y no en forma estruendosa y exagerada.
Existe otro tipo de destapadores muy popularizado que consta de un capuchón metálico y dos especies de alas que al hacer presión hacia abajo va extrayendo el corcho. No es el mejor sistema, es muy aparatoso y no es de lo más estético.
Un sistema que está muy difundido en los últimos años es el del sacacorchos neumático. Un sistema que recomiendo especialmente para mujeres o todo aquel que con el mínimo esfuerzo quiera extraer el corcho. El sistema consiste en un cilindro, normalmente forrado en madera, del que sale una aguja que se inserta en el corcho y al insuflar aire con el cilindro dentro de la botella a través de esta aguja, sale el corcho fácilmente. Este tipo de sacacorchos tienen otro costo que los de demás y se consiguen desde los $140 en adelante.
Hay muchas más variedades, tipos y diseños de sacacorchos, pero en cuanto a eficiencia del sistema creo que estos son los más adecuados.
Un último detalle no debe pasar inadvertido. Es muy habitual , incluso en buenos restaurantes, destapar la botella de vino de forma tal que en su última parte aceleran el proceso para producir el ruido típico de descorche y normalmente miran a los demás buscando aprobación . No está bien, no es elegante y además no tiene sentido. Como todo nacimiento debe darse con suavidad, delicadeza y no en forma estruendosa y exagerada.